Competencia Digital - Ikasnova

La competencia digital se define como el uso creativo, crítico y seguro de las tecnologías de la información y la comunicación para alcanzar los objetivos relacionados con el trabajo, la empleabilidad, el aprendizaje, el uso del tiempo libre, la inclusión y participación en la sociedad. Y se plantea como un aspecto básico para toda nuestra sociedad que afecta a todas las esferas de nuestras vidas. 

"El desarrollo de la competencia digital no supone solamente el dominio de los diferentes dispositivos y aplicaciones. El mundo digital es un nuevo hábitat en el que la infancia y la juventud viven cada vez más: en él aprenden, se relacionan, consumen, disfrutan de su tiempo libre. Con el objetivo de que el sistema educativo adopte el lugar que le corresponde en el cambio digital, se incluye la atención al desarrollo de la competencia digital de los y las estudiantes de todas las etapas educativas, tanto a través de contenidos específicos como en una perspectiva transversal, y haciendo hincapié en la brecha digital de género." (LOMLOE, 2020)

La Unión Europea, para impulsar el desarrollo de la competencia digital de sus ciudadanos y responder a los retos y responsabilidades que implica la revolución digital que vivimos, creó en 2013 y revisa periódicamente (la última versión 2.2 data de 2022) DigComp, el Marco de Competencias Digitales para la Ciudadanía, cuyas declinaciones en el contexto del mundo educativo se conocen como DigCompEdu (centrado en la competencia digital del profesorado) y DigCompOrg (en crear organizaciones digitalmente competentes).

En 2022, el Ministerio de Educación y Formación Profesional, de la mano del INTEF y con la colaboración de las CCAA (entre las que se encontraba Navarra), presentó la adaptación del DigCompeEdu a la realidad educativa estatal, el conocido como Marco de Referencia de la Competencia Digital Docente.

El objetivo de este marco es determinar qué competencias debe adquirir y desarrollar cualquier docente que imparta enseñanzas reguladas en la Ley Orgánica de Educación (actualmente la LOMLOE) en el ejercicio de su profesión, independientemente de la materia, de la etapa o de la estrategia metodológica que emplee. Siendo, por su propia naturaleza, muy general, recoge funciones que todas y todos los docentes comparten.

Ambos marcos establecen 6 áreas competenciales:

• Área 1 - Compromiso profesional: Uso de las tecnologías digitales para la comunicación, la colaboración y el desarrollo profesional.
   

• Área 2 - Contenidos digitales: Búsqueda, creación e intercambio de contenidos digitales.
   

• Área 3 - Enseñanza y aprendizaje: Gestión y organización del uso de las tecnologías digitales en la enseñanza y el aprendizaje.
   

• Área 4 - Evaluación y retroalimentación: Utilización de tecnologías y estrategias digitales para mejorar la evaluación.
   

• Área 5 - Empoderamiento de los estudiantes: Uso de las tecnologías digitales para mejorar la inclusión, la personalización y el compromiso activo del alumnado con su propio aprendizaje.
   

• Área 6 - Desarrollo de la competencia digital de los estudiantes: Capacitación de los estudiantes para utilizar de forma creativa y responsable las tecnologías digitales para la información, la comunicación, la creación de contenidos, el bienestar y la resolución de problemas.

Estas 6 áreas quedan organizadas, a su vez, en 3 bloques centrados en la dimensión digital de las competencias profesionales (Área 1) y pedagógicas (áreas 2 a 5) de los docentes, por un lado, y del desarrollo de las competencias del alumnado.

La competencia profesional docente (área 1) implica la Integración de conocimientos, destrezas, habilidades y actitudes que han de ponerse simultáneamente en juego para desempeñar la función docente y para resolver los problemas que pudieran presentarse en una situación singular concreta a través del uso de las tecnologías digitales o vinculadas con el uso de las tecnologías digitales como profesionales de la educación.

La competencia pedagógica digital de los educadores y educadoras es aquella que permite adoptar estrategias de enseñanza y aprendizaje eficientes, inclusivas e innovadoras. Representan, como destaca el propio MRCDD, el núcleo del marco. Están vinculadas a las fases características de cualquier proceso de enseñanza, tanto si se apoya en las tecnologías como si no. Las competencias enumeradas en estas áreas detallan cómo hacer un uso eficiente e innovador de las tecnologías digitales al programar (área 2), implementar (área 3) y evaluar (área 4) la enseñanza y el aprendizaje. 

Para terminar, el área 6 reconoce el potencial de las tecnologías digitales para las estrategias de enseñanza y aprendizaje centradas en el estudiante. 

El nivel de progresión alcanzado en cada competencia permitirá a su vez establecer una serie de afirmaciones sobre el desempeño de lo que cada docente es capaz de hacer. La lista de afirmaciones estará sujeta a revisión continua y es considerada únicamente como un medio para ilustrar su evolución.

Algunos ejemplos:

El nivel A2, acreditará que el profesorado se ha iniciado en el uso de las herramientas digitales y los servicios puestos a su disposición por la administración educativa (aulas virtuales, plataformas para creación de contenidos, seguimiento académico en portales dedicados de Educación, etc.). Siendo un nivel todavía de iniciación, la puesta en práctica de su competencia puede requerir todavía el apoyo y asesoramiento tanto para la aplicación de la tecnología en el aula (dimensión metodológica) como para su uso (dimensión instrumental). 

Esta progresión será además acumulativa, es decir, cuando una persona es competente A2, ha de ser capaz de realizar las actividades de ese nivel y de todos los inferiores.

En este sentido, un nivel B1 se corresponde con un profesorado que ya ha integrado las tecnologías digitales en su práctica docente y las utiliza de forma autónoma, siendo capaz de seleccionar, crear y utilizar los recursos digitales adecuados a los objetivos de aprendizaje del alumnado, además de integrar en los servicios facilitados desde la administración educativa, cumplir con los protocolos de seguridad y protección de datos y aplicar las estrategias adquiridas en su formación previa.

La Resolución 102/2024, de 21 de marzo por la que se regula el procedimiento de acreditación, certificación y reconocimiento de la competencia digital docente para el personal docente de los centros educativos no universitarios sostenidos con fondos públicos en el ámbito territorial de la Comunidad Foral de Navarra, ha adaptado los procedimientos de acreditación establecidos a nivel estatal para los y las docentes de Navarra, estableciendo:

Nivel A1

• Titulaciones universitarias oficiales que habiliten para el ejercicio de la profesión docente, menciones sobre tecnologías educativas en los Grados en maestro o Máster oficial universitario en materia de competencia digital docente para el uso de las tecnologías en el aula; siempre que cubran todas las áreas de un nivel A1 en el desarrollo de las competencias del MRCDD vigente y que así conste en los planes de estudios.
   

• Certificación de la formación: suma de actividades formativas con un mínimo de 40 h y que atiendan a todas las áreas de este nivel, reconocidas para este fin por la Administración Educativa.
   

• Certificación de la formación: “Laboratorios 1 y 2”, “Introducción al conocimiento de la LOMLOE, una oportunidad para el cambio” y “Acreditación de la CDD A1”, proporcionada por ikasNOVA desde la plataforma de formación.
   

• Prueba específica de acreditación del nivel A1.

Nivel A2

• Titulaciones universitarias oficiales que habiliten para el ejercicio de la profesión docente, menciones sobre tecnologías educativas en los Grados en maestro o Máster oficial universitario en materia de competencia digital docente para el uso de las tecnologías en el aula; siempre que cubran todas las áreas de un nivel A2 en el desarrollo de las competencias del MRCDD vigente y que así conste en los planes de estudios.
   

• Certificación de la formación: suma de actividades formativas con un mínimo de 50 h y que atiendan a todas las áreas de este nivel, reconocidas para este fin por la Administración Educativa.
   

• Certificación de la formación: Curso tutorizado para la acreditación de la CDD nivel A2 proporcionado por ikasNOVA desde la plataforma de formación.
   

• Certificación de la formación más la superación de las tareas: Seminario en centro para la acreditación de la CDD nivel A2.
   

• Prueba específica de acreditación del nivel A2.

Nivel B1

• Certificación de la formación: suma de actividades formativas con un mínimo de 60 h y que atiendan a todas las áreas de este nivel, reconocidas para este fin por la Administración Educativa.
   

• Certificación de la formación: Curso tutorizado para la acreditación de la CDD nivel B1 proporcionado por ikasNOVA desde la plataforma de formación.
   

• Certificación de la formación más la superación de las tareas: Seminario en centro para la acreditación de la CDD nivel B1.
   

• Haber tutorizado la formación en centro y/o el curso tutorizado online para la acreditación de la CDD nivel A2 desarrollado desde ikasNOVA anterior al curso escolar 2024-2025.
   

• Prueba específica de acreditación del nivel B1 y superación de una evaluación del nivel B1 del MRCDD vigente, a través de la observación del desempeño, siguiendo una guía de evaluación pública que se publicará próximamente.
   

• Haber participado en proyectos eTwinning con sello de calidad desde el año 2020 y cuya valoración haya sido de, al menos, 18 puntos, según queda recogido en el informe del INTEF de vinculación del MRCDD con la rúbrica del sello de calidad eTwinning . y cumpla con los requisitos establecidos en la guía de evaluación.

• Se acreditará de oficio a las personas que hayan desempeñado, durante dos cursos escolares completos consecutivos en un centro público, alguno de los puestos complementarios descritos en el anexo II, apartado 1, a partir del curso escolar 2016-2017 y hayan impartido docencia directa en el aula todo ese periodo.

Nivel B2

• Certificación de la formación: suma de actividades formativas con un mínimo de 70 h y que atiendan a todas las áreas de este nivel, reconocidas para este fin por la Administración Educativa.
   

• Certificación de la formación: Curso tutorizado para la acreditación de la CDD nivel B2 proporcionado por ikasNOVA desde la plataforma de formación y superación de una evaluación del nivel B2 del MRCDD vigente, a través de la observación del desempeño, siguiendo una guía de evaluación pública que se publicará próximamente.
   

• Haber tutorizado la formación en centro y/o el curso tutorizado online para la acreditación de la CDD nivel B1 desarrollado desde ikasNOVA anterior al curso escolar 2024-2025.
   

• Prueba específica de acreditación del nivel B2 y superación de una evaluación del nivel B2 del MRCDD vigente, a través de la observación del desempeño, siguiendo una guía de evaluación pública que se publicará próximamente.

• Se acreditará de oficio a las personas que hayan desempeñado, durante dos cursos escolares completos consecutivos en un centro público, alguno de los puestos complementarios descritos en el anexo II, apartado 2, a partir del curso escolar 2016-2017 y hayan impartido docencia directa en el aula todo ese periodo.

Nivel C1

• Superación de una evaluación del nivel C1 del MRCDD vigente a través de la observación del desempeño siguiendo la guía de evaluación que se publicará próximamente y en la que, además de otras evidencias, se valorará:
  • Haber ejercido la tutorización de, al menos, 100 horas de formación relacionadas con la competencia digital docente y/o haber participado como ponente de, como mínimo, 20 horas que cubran al menos una competencia de cada una de las áreas del MRCDD.
  • Análisis de evidencias documentadas y específicamente relacionadas con las competencias digitales docentes en relación a:
    • a) Premios nominales otorgados por las Administraciones educativas.
    • b) Las publicaciones con NIPO y/o ISBN, ISSN, DOI o URL.
    • c) Participación en proyectos colectivos de investigación y de innovación asociados a la competencia digital docente.
    • d) Cualquier otra evidencia que acredite el nivel C1.
• Ser embajador de proyectos eTwinning a partir del curso 2021-2022 y cumplir con los requisitos establecidos en la guía de evaluación.
• Se acreditará de oficio un nivel C1 de CDD a las personas que hayan sido asesores de Tecnologías Educativas del Departamento de Educación del Gobierno de Navarra, durante dos cursos académicos completos desde el curso 2016-2017.

Nivel C2

Se podrá acreditar el nivel C2 por áreas mediante:

• Superación de una evaluación del nivel C2 del MRCDD vigente a través de la observación del desempeño siguiendo la guía de evaluación que se publicará próximamente.
• Análisis de evidencias documentadas y específicamente relacionadas con las competencias digitales docentes conseguidas a partir del curso escolar 2026-2017 en relación a:
  • Premios nominales otorgados por las Administraciones educativas.
  • Publicaciones con NIPO y/o ISBN, ISSN, DOI o URL.
  • Participación como ponente en congresos de reconocido prestigio de ámbito nacional e internacional.
  • Coordinación y autoría de proyectos de investigación y de innovación educativa asociados a la competencia digital docente.
  • Reconocimientos por parte de las Administraciones Educativas de haber implementado mejoras significativas en el ámbito educativo.
  • Currículo para evaluar la trayectoria profesional.
  • Cualquier otra evidencia que acredite el nivel C2.

Las horas de formación necesarias empezaron a impartirse en 2023 en distintos formatos, para el nivel A1 con los Laboratorios y la formación en la LOMLOE y para el A2 con las modalidades formativas síncronas y presenciales en centro y asíncronas individuales a través de IKASAULA. En la actualidad hay más de 8600 docentes con la formación para acreditar el nivel A2 ya superada.

NOTA: Apartado 1 Puestos Complementarios que acrediten un nivel B1: Responsable PDC | Coordinador/a de aula ikasNOVA. Apartado 2 Puestos Complementarios que acrediten un nivel B2: Coordinadores/as de Tecnologías Educativas | Responsables ikasNOVA - TDE

La formación docente es a la vez un derecho y un deber de todo el personal docente. Liderada tanto desde el Departamento de Educación, a través de la Sección de Formación y de los Centros de Apoyo al Profesorado (CAP), como desde los propios centros, su fin último es mejorar la calidad del sistema educativo navarro. 

Desde el curso 2020-2021 se han venido desarrollado diferentes programas de formación con la mira puesta en la acreditación de la Competencia Digital Docente. Sin desdeñar el resto de competencias, ni mucho menos, durante el bienio 2022-2024, como parte de las medidas englobadas en el MRR, se está haciendo una apuesta decidida en la capacitación docente por desarrollar, afianzar y acreditar la competencia digital docente. Se trata de una etapa previa e imprescindible para trabajar la competencia digital del alumnado con las máximas garantías.

Durante el curso 2022-2023 más del 80% del profesorado de la red pública ya había realizado la formación para obtener un certificado de competencia digital docente A1.

Cada área del MRCDD se desglosa en una serie de competencias hasta sumar un total de 21 para cada una de las cuales se puede alcanzar hasta 6 niveles de desempeño, desde el A1 al C2.

Estos niveles de aptitud están tomados de otro marco, el Marco Común de Referencia de las Lenguas, que agrupa los niveles de desarrollo de una competencia en 3 etapas (A, B, C) y divide a su vez el nivel de progresión en cada una de ellas en 2 niveles de aptitud (1 y 2).

La competencia digital es una de las ocho competencias clave del sistema educativo estatal, resultantes de la adaptación al mismo de las competencias establecidas en la Recomendación del Consejo de la Unión Europea para el aprendizaje permanente (2018). Estas recomendaciones tienen como objetivo “alinear todos los principios y fines de los sistemas educativos europeos a los retos y desafíos del siglo XXI. La sociedad actual necesita que las personas tengan competencias para poder ser relevantes y significativos ante las demandas de un mundo globalizado, tecnológico y cambiante, para poder alcanzar así su pleno desarrollo personal, social y profesional que haga posible el desarrollo social y económico de la sociedad, vinculado al conocimiento y la participación de la ciudadanía”. 

Asimismo, el marco de competencia global (PISA, 2018) que busca preparar a nuestros jóvenes para un mundo inclusivo y sostenible tiene muy presente la competencia digital. Por un lado, necesitamos que el alumnado pueda sacar partido de los espacios digitales, entender mejor el mundo en el que viven y expresar su opinión en línea de manera responsable, y por otro, debe tener competencias para ser críticos y creativos ante las las transformaciones radicales que las tecnologías digitales han provocado en nuestras perspectivas, interacciones y su percepciones.

Para que una alumna o alumno, como cualquier ciudadana o ciudadano, sea digitalmente competente, necesita desarrollar una serie de conocimientos, destrezas y actitudes organizadas en torno a 5 grandes áreas:

• La información, alfabetización informacional y el tratamiento de datos: identificar, localizar, recuperar, almacenar, organizar y analizar información digital, evaluar su finalidad y relevancia.
   

• La comunicación y colaboración: comunicar en entornos digitales, compartir recursos en línea, conectar y colaborar con otras personas mediante herramientas digitales, interactuar y participar en comunidades y redes; conciencia intercultural.
   

• La creación de contenido digital: crear y editar nuevos contenidos (textos, imágenes, videos...), integrar conocimientos y reelaborar contenidos previos, realizar producciones artísticas, contenidos multimedia y programación informática, saber aplicar los derechos.

• La seguridad: protección personal, protección de datos y de la identidad digital, uso de seguridad, uso seguro y sostenible.
   

• La resolución de problemas: identificar necesidades y recursos digitales, tomar decisiones para seleccionar las herramientas digitales apropiadas según la necesidad o finalidad, resolver problemas conceptuales y técnicos a través de medios digitales, uso creativo de la tecnología, actualizar la competencia propia y la de otros.

El Plan ikasNOVA pone a disposición del profesorado un ecosistema de situaciones y actividades para potenciar el desarrollo de la competencia digital del alumnado, el destinatario último de la estrategia de transformación digital llevada a cabo durante todos estos años. Ya durante el período 2017-2019, 18 centros navarros participaron en el proyecto CRISS financiado por la Comisión Europea para la adquisición y certificación de la competencia digital.

Los asesores y asesoras ikasNOVA han creado, tanto para primaria como para secundaria, una secuenciación para trabajar con el alumnado las distintas áreas de la competencia digital que les permita no solo adquirir las destrezas establecidas en la LOMLOE sino aquellas que forman parte de la Competencia Digital Ciudadana (DigComp).

Este curso académico se ha puesto en marcha el Programa STREAM-AI que incluye acciones enfocadas a preparar al profesorado y alumnado en el ámbito de la programación, robótica, realidad virtual, aumentada y mixta, y la Inteligencia Artificial.
 

Los centros educativos forman parte de un mundo en cambio permanente y de una sociedad y un mercado laboral cada vez más digitalizados. Han de ser capaces de dar respuestas a esta nueva realidad para formar en su seno a la ciudadanía del futuro con las competencias necesarias para desenvolverse en un entorno digitalizado.  

El Marco Europeo para Organizaciones Educativas Digitalmente Competentes (DigCompOrg, 2015), a través de sus 7 elementos clave (liderazgo y gobernanza, enseñanza y aprendizaje, desarrollo profesional, evaluación, contenido y currículum, colaboración y networking e infraestructura) establece una primera guía reflexión que conduzca a los centros educativos a integrar y desplegar la transformación digital educativa de la mejor manera posible.

La LOMLOE (2020) va un paso más allá y recoge en su articulado la obligatoriedad de elaborar un Plan Digital de Centro (PDC). Su desarrollo ha de permitir, en cada centro educativo, la adopción de criterios que permitan coordinar todos los aspectos que afectan al uso de las tecnologías en la educación, desde aquellos relacionados con cuestiones organizativas, hasta otros más pedagógicos y propios de los procesos de enseñanza y aprendizaje.

Con el PDC se pretende:

• Evaluar la situación de un centro educativo con relación al uso de las TIC en los distintos elementos clave que recoge el DigCompOrg, para poder, a continuación, diseñar y emprender un proceso de transformación en el centro.
   

• Reconocer el Plan Digital de Centro como un recurso clave para la planificación de la estrategia digital de una organización educativa.
   

• Valorar las implicaciones de las organizaciones escolares para desarrollar una cultura digital en las mismas. 

El PDC se ha elaborado en el seno del propio centro para que sirva así no solo de referencia para toda la comunidad educativa sino como plan de mejora para una integración real y adecuada de las tecnologías en la educación en todos los procesos. Estos PDC han acompañado al Proyecto Educativo, al Proyecto de Dirección y a la Programación General Anual, en los que está integrado.

Las características fundamentales del PDC son:

• Recoge de forma explícita una visión de conjunto de las expectativas, metas y objetivos del centro a corto, medio y largo plazo con respecto a las TIC. En consecuencia, ha de contener objetivos claros, medibles, alcanzables y realistas.
   

• Ha de ser viable y dinámico: los objetivos deberán tener en cuenta la realidad del contexto del centro educativo y habrá de ser revisado cada curso para realizar las actualizaciones necesarias.
   

• Debe ser consensuado y organizado, para ello debe procurarse en su diseño la mayor participación posible de la comunidad educativa.
   

• Estará contextualizado, es decir, tendrá en cuenta las características del contexto de cada centro. Por tanto, es fundamental llevar a cabo un diagnóstico previo que permita conocer el estado actual. Es en esta fase donde la herramienta SELFIE será de gran utilidad. 

La diversidad de aspectos que debieron contemplarse en la elaboración del plan digital (pedagógicos, formativos, organizativos, de gestión de recursos, etc.) hizo necesaria una estructura organizativa donde, en sus inicios, se creó una comisión o grupo de trabajo para su consenso y elaboración. Este grupo estuvo constituido por la persona responsable del PDC, un integrante del equipo directivo, la persona encargada de la coordinación de Tecnologías Educativas (TE) y/o responsable ikasNOVA y una representación del profesorado.

Para la realización del Plan Digital los centros estuvieron acompañados por un asesor o asesora ikasNOVA que facilitó los recursos necesarios para su elaboración; tales como vídeos, plantillas, cronograma….Estos recursos fueron confeccionados conjuntamente por los 8 centros piloto que, a lo largo del curso 2021-2022, iniciaron esta primera fase del PDC;

ikasNOVA ha impulsado el uso de SELFIE (2015) en los centros navarros para guiarlos en el desarrollo de su Plan Digital de Centro (PDC)

SELFIE es una herramienta en línea que pretende ayudar a los centros escolares a plantearse cómo utilizan las tecnologías digitales para lograr un aprendizaje efectivo e innovador. Con SELFIE, los centros pueden obtener una instantánea del punto en el que se encuentran en relación con el uso de las tecnologías digitales, teniendo en cuenta las opiniones del profesorado, el alumnado y el equipo directivo.

Desarrollada por la Comisión Europea y disponible de forma gratuita para todos los centros educativos, permite obtener en línea un informe de autoevaluación del centro (Informe SELFIE). 

El informe SELFIE ofrece orientaciones para tomar decisiones, entre otros, sobre los siguientes aspectos fundamentales:

• Enumerar los ámbitos que utilizan las tecnologías con eficacia y dónde se puede mejorar.
   

• Definir los objetivos de la transformación digital y comprobar si son conocidos por la comunidad educativa.
   

• Detectar las necesidades de formación en competencia digital docente.
   

• Priorizar los recursos en los que debería invertirse la financiación.

A partir del Informe SELFIE, el centro generará un análisis DAFO que le ayude a reflexionar sobre su situación y a elaborar el Plan Digital de Centro en términos de objetivos y actuaciones. 

Los objetivos se formularán partiendo de la situación del centro, con la voluntad de avanzar. Se formularán para un período determinado (preferiblemente el curso, en el marco de un plan plurianual) y en colaboración con los órganos de coordinación pedagógica del centro. Deben ser específicos, realistas y evaluables. 

En paralelo, se acordarán las actuaciones necesarias para alcanzar los objetivos que el centro se haya propuesto. En la concreción de las actuaciones se tendrán en cuenta los agentes implicados, los procedimientos previstos, los recursos necesarios y los indicadores de logro. Las actuaciones se agruparán en torno a los elementos del DigCompOrg.
 

El SELFIE no es la única evaluación en el trayecto hacia la madurez como centros digitalmente competentes. El propio PDC ha contemplado indicadores de logro para realizar anualmente una evaluación de los progresos alcanzados en su desarrollo.